¿Buenas, malas, tibias? Acá no vamos a hacer juicio de valor, pero sí hablar de las nuevas noticias en torno al Impuesto a las Ganancias. Sí, esas mismas palabras que escuchás y te corre la gota de sudor frío por la espalda, aunque no las termines de entender bien.
Es que no hay dudas de que, junto con el Impuesto PAIS, el Impuesto a las Ganancias es el más mencionado al momento de hacer las cuentas. Por eso no está de más estar al tanto de las noticias. Por ejemplo, ¿sabías que subieron el mínimo no imponible? ¿O que 380 mil personas ya no van a pagar el impuesto? ¿Y si sos parte de ese grupo, no te conviene saberlo?
Tranqui. Seguí leyendo que te contamos las novedades en torno a la Ley de Impuesto a las Ganancias y, obviamente, hacemos un refresh de este tributo en caso de que todavía no te haya quedado del todo claro.
Nuevo piso del Impuesto a las Ganancias 2022
Arrancamos con lo más reciente. Subieron el piso de Ganancias y así se festeja en el Obelisco. En criollo: desde noviembre, las remuneraciones brutas mensuales que no superen los $330.000 no van a tener que pagar el porcentaje de retención correspondiente al impuesto. ¿Por qué esto es una buena noticia? Porque hasta el 31 de octubre, si cobrabas $280.792 ya te correspondía el descuento.
A ver, puede parecer un montón de plata, pero si te ponés a pensar cuánto salen las cosas y cuánto necesitamos para vivir mes a mes -sobre todo una familia-, ya no es una fortuna. Así que el que eleven el mínimo el piso es una buena noticia. Después entramos en el debate de si es suficiente o no, por ahora celebramos las pequeñas cosas.
Un dato importante: además de tener que ganar más para empezar a pagar este impuesto, hay otros beneficios, como el de la deducción especial para tratar de mantener cierta progresividad entre lo que se paga, sobre todo de un sector de la escala impositiva al otro. Así, con el nuevo decreto que actualiza los montos -porque la ley establece una actualización anual, pero con esta inflación, mamita…- quienes ganen entre $330.000 y $431.988 tienen una deducción especial.
Ahora bien, vayamos de frente manteca: el cálculo para saber si entrás en la retención o no, y cuánto es el Impuesto a las Ganancias que tenés que pagar no es de lo más sencillo. Entonces, ¿cómo hacemos?
¿Cómo se calcula el Impuesto a las Ganancias?
El Impuesto a las Ganancias es un impuesto que contempla todas las ganancias obtenidas en un año fiscal, es decir, los ingresos percibidos. A partir de determinado monto tenés que empezar a pagarlo en el porcentaje que corresponda. Porque, datazo, no hay una cantidad fija, sino que varía según cuánto ganes: existe una escala o alícuota progresiva desde el 5% hasta el 35% aplicada sobre la ganancia neta.
Las variables que definen quiénes pagan Ganancias y quiénes no -y en qué porcentaje, obvio- se definen según la variación de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte), que considera el menor de los valores entre el salario bruto y el promedio de salarios brutos. Igual, suele haber una tabla que indica las diferentes alícuotas, como para que tampoco se haga tan difícil.
El tema es que tenés que tener en cuenta las deducciones. O sea, que tu sueldo bruto sea igual al piso del impuesto no significa que automáticamente pagás Ganancias. Lo que se tiene en cuenta es la base imponible de tus ingresos, lo que queda después de restar una serie de cuestiones. Es decir, las ganancias netas (sí, esas sobre las cuales se aplican las alícuotas, ¿ves que va teniendo un poco más de sentido la cosa?).
Descuentos y deducciones
Si algo nos encanta, son los descuentos. Y en el Impuesto a las Ganancias hay tres tipos:
- Obligatorias: jubilación, obra social y PAMI.
- Personales: cónyuge, hijos, familiares a cargo.
- Permitidas: la posibilidad de producir ahorros en el pago del tributo con cuestiones como cuota médico asistencial, seguro de vida, alquiler, servicio doméstico e interés crédito hipotecario, , honorarios médicos, gastos en indumentaria / equipamiento, entre otras.
Todos estos “gastos” son los que tenés que ir restando -siempre y cuando corresponda y considerando que tienen un límite de deducción- a tus ganancias brutas, para así obtener la base imponible sobre la que finalmente se aplica el Impuesto a las Ganancias. Con ese resultado también te fijás qué porcentaje de retención te corresponde.
Básicamente esto iguala un poco el partido, porque no va a pagar el mismo Impuesto a las Ganancias 2022 una persona soltera que una casada y con tres hijos, ya que los gastos y obligaciones de una y de otra son bastante distintos. O sea, ¿vos viste cuánto salen los pañales?
Che, ¿y qué onda con el aguinaldo? Este año zafamos y el Salario Anual Complementario queda exento de pagar ganancias si el promedio de las remuneraciones brutas mensuales no superan los $330.000 en el segundo semestre del año. ¡Se festeja!
¿Conclusión? La mejor forma de saber si tenés que pagar o no es usar un simulador de Impuesto a las Ganancias 2022, la vieja y fiel calculadora. Hay un montón disponibles en la web, y te van a facilitar la vida por mil. Podés hacer ahora mismo el cálculo para ver si seguís zafando del gravamen, o si por lo menos tenés que pagar un poquito menos.