La familia sea unida, esa es la ley primera. Bueno, la cita no es exacta, pero el concepto del Martín Fierro es el mismo. El problema es cuando las finanzas familiares -o un mal manejo de las mismas- se interponen en la paz hogareña.
Al igual que en cualquier relación, la confianza es clave, y es tan difícil construirla como fácil es perderla. Sobre todo cuando las cuentas no cierran al fin de mes, y empezamos a sacar los trapitos al sol: que los zapatos que tarjeteaste, que el juego de la Play que compraste sin consultar, que los ahorros que usaste para la tele de 80”, etc, etc, etc. Nadie sale ganando en una situación así. Por eso, las finanzas familiares pueden ser el gran enemigo de la famiglia unita (sí, lo decimos haciendo montoncito con los dedos). Y ni hablar de las finanzas de pareja.
Ahora, no hay problema sin solución, y ciertamente hay formas de evitar las peleas por plata entre la cena y el postre. ¿Cómo organizar las finanzas familiares para lograr una economía sana y el bienestar común? ¿Qué no hacer para empezar la guerra? Te lo contamos acá.
¿Qué son las finanzas familiares?
Las finanzas familiares son la administración del patrimonio y los gastos de una familia. Es decir, la gestión de la plata que ingresa al grupo familiar, y la que sale. El objetivo final es definir criterios, lineamientos, pautas del uso del dinero para que todas las personas del hogar alcancen una mejor situación económica.
En el día a día, existen muchas formas en que las finanzas familiares pueden o se hacen presentes en las casas:
- Cuando se establecen objetivos de ahorro en común.
- Cuando siguen pautas básicas en el uso de herramientas y productos de financiamiento, como las tarjetas de crédito.
- Cuando se hace un presupuesto familiar, con gastos prioritarios y objetivos.
- Cuando los más peques aprenden sobre finanzas observando a las personas mayores de la casa.
¿Cuál es la importancia de las finanzas familiares?
Básicamente, la importancia de las finanzas familiares está en su estrecha relación con la educación financiera. Es importante que los más grandes enseñen a las y los niños a manejar responsablemente su plata, y la mejor forma de hacerlo es con el ejemplo. Con el buen ejemplo, obvio.
Además, ya dijimos que todas las relaciones tienen en su base la confianza, y el uso que hagamos de la plata es parte de ella. Siempre es mejor ponerse de acuerdo respecto de las finanzas y respetar ese pacto. Si las cuentas claras conservan la amistad, también lo hacen con las relaciones familiares.
¿Cómo se aplican las finanzas en el hogar? Tips para la convivencia
El manejo de plata es algo con lo que lidiamos a diario, así que nunca está de más tener algunas cosas charladas de antemano, para no meter la pata más adelante.
- Tener metas en conjunto establecidas es clave para después no andar suponiendo cosas que no son. ¿Cada integrante de la pareja quiere un auto nuevo, en serio?
- Establecer montos para uso libre de cada uno. La famosa “mesada” pero de este lado del hemisferio. Porque todos nos merecemos un gustito, siempre y cuando no perjudique al resto.
- Infaltable: presupuesto familiar. O sea, un presupuesto es fundamental siempre, imaginate si no va a serlo para un hogar. Y dato: el ahorro viene antes que la inversión.
- Charlar siempre, que hablando se entiende la gente. Incluí a los más peques siempre que puedas —y siempre que corresponda, no te olvides de que siguen siendo chicos.
7 actitudes que van en contramano
Estas son algunas de las cosas que, si las hacés, vas a estar cantando “metí la pata”, y no en una lata, precisamente.
1. Silencio
¿Viste que hablamos de la importancia de charlar? Bueno, algo que claramente no va a ayudar en las finanzas familiares es no involucrar a las otras personas en las situaciones de dinero. Los temas de plata -ingresos, gastos, preocupaciones, hábitos, etc.- no tienen que ser el único tema de conversación, pero tienen que estar sobre la mesa.
2. Mentiras
¿Dónde se ha visto que la falta de transparencia haga bien? Quizás si hablamos de ropa, pero en cualquier relación, mentir es lo mismo que cavar tu propia tumba. Ojo, que pecar por omisión tampoco está bien. Mejor practicar la honestidad siempre, sobre todo cuando hay plata de por medio.
3. Suponer antes que saber
De nuevo, la comunicación es clave. Tomar decisiones creyendo que sabemos qué es lo que quieren las otras personas no suele llevar a buen puerto. Todos los miembros de la familia tienen que tener voz y voto -proporcional, en todo caso- al momento de decidir algo que involucre a las finanzas familiares.
4. Cada uno por su lado
Objetivos y prioridades diferentes llevan a caminos diferentes. ¿O el viajar por el mundo como nómada y comprar una casa para tener 10 perros son compatibles? Tener metas en común hace que todos los esfuerzos financieros vayan en la misma dirección y el resultado sea más beneficioso para todos y todas.
5. Finanzas familiares y personales, asunto separado
Tu plata, mi plata. Lamentamos informarte que, llegado cierto punto de la relación -ni hablemos de la familia- esta lógica ya no funciona. Son un equipo, y lo que hacen de forma individual afecta la performance general. Obvio que pueden tener una parte destinada para gastos personales, pero todo tiene que estar charlado previamente. 2×1 en madurez financiera e individualidad.
6. Improvisación
No planificar ni tener un presupuesto es lo mismo que ir dando tumbos por el camino. Desde mudanzas, vacaciones y proyectos, hasta mascotas e hijos: todo requiere plata, y tenerlo en mente y más o menos planeado hace que las sorpresas sean mucho menores.
7. Carpe Diem
Relacionado con el punto anterior, vivir el día a día está buenísimo como filosofía. Ahora, finanzas familiares de por medio, ya no tanto. En una familia, lo que hacemos impacta en las otras personas: el ahorro, el consumo responsable y la inversión son herramientas muy útiles a corto, mediano y largo plazo que no podemos no tener en cuenta.
¡Felicitaciones por llegar hasta acá! Se nota que te interesa que las cosas funcionen en casa, ¿no? ¿Agregarías un punto más al listado de las actitudes que complican las finanzas familiares? ¡Contanos!
Excelentes consejos
¡Gracias, Enrique! Puede parecer que son cosas obvias, pero no no no. No lo son. Gracias de verdad por pasarte y comentar, ¡te esperamos para seguir charlando! ?