Cada negocio es único, al igual que cada ser humano. Y así como nuestro ADN determina nuestras características físicas, el público objetivo determina las características de tu negocio y cuál será la estrategia de marketing más efectiva para impulsarlo.
Encontrar a tu público objetivo puede parecer una búsqueda del tesoro. Pero en lugar de un mapa antiguo y una pala, necesitás datos, investigación y un poco de intuición. Acá te explicamos todo lo que tenés que tener en cuenta para encontrarlo.
¿Por qué es importante conocer al público objetivo?
No vas a invitar a la misma gente a una fiesta de cumpleaños para niños que a una despedida de soltero, ¿verdad? Lo mismo pasa con tu negocio. Necesitás encontrar a esas personas que realmente sean compatibles con lo que ofrecés. Eso es tu público objetivo.
El público objetivo es el pilar sobre el que se construye cualquier estrategia de marketing. Conocerlo permite diseñar productos y servicios que satisfagan sus necesidades, crear mensajes que resuenen con ellos y seleccionar los canales de comunicación más efectivos para llegar a ellos.
Además, conocer al público objetivo ayuda a evitar el estrés financiero. Cuando se sabe a quién se dirige un negocio, se pueden optimizar los recursos, sin hacer gastos innecesarios en publicidad o promociones que no llegan a las personas adecuadas.
¿Cómo se encuentra al público objetivo?
Encontrar al público objetivo no siempre es simple, requiere un trabajito de tu parte. Pero no te preocupes, hay algunas estrategias que pueden ayudarte:
- Analizá a tu competencia. Fijate en las empresas que ofrecen productos o servicios similares al tuyo. ¿A quién se dirigen? ¿Cómo se comunican con su público? Eso te puede dar una idea de quién podría estar interesado en lo que vos ofrecés.
- Investigá el mercado. Hacé encuestas o entrevistas para obtener información directa de los posibles clientes. Acá podés manejar un presupuesto suculento y contratar a una consultora que se dedique a eso, ¡o usar las redes sociales! Jugá con tus seguidores, y hacé campañas de paid media que lleguen a personas que todavía no te conocen. Preguntales qué necesitan, qué prefieren, cómo toman sus decisiones de compra, cómo se comunican, etc.
Otra estrategia bastante económica es organizar un sorteo. La clave para participar es que te den feedback sobre lo que buscan en un negocio de tu rubro. ¡Pueden surgir respuestas muy interesantes!
- Analizá a tus clientes actuales: Si ya tenés un negocio en marcha, podés aprender mucho de tus clientes actuales. ¿Qué tienen en común? ¿Por qué te eligieron a vos y no a alguien de la competencia?
Segmentación del público objetivo
Una vez que encontraste a tu público objetivo, el siguiente paso es segmentarlo. Dicho con otras palabras, hay que dividirlo en grupos más pequeños, basados en características comunes. Por ejemplo, podrías tener un grupo de jóvenes adultos que están interesados en la moda sostenible, y otro grupo de adultos mayores que buscan ropa cómoda y de alta calidad.
Finalmente, una vez que identificaste y segmentaste a tu público objetivo, es hora de incorporarlo en tu estrategia de marketing. Esto significa crear mensajes y campañas que resuenen con cada segmento de tu público objetivo. Recordá que el norte es conectar con ellos a un nivel más profundo, entender sus necesidades y deseos, y demostrar cómo tu producto o servicio puede satisfacerlos.
Prueba y error
Si ya tenés una idea de quién está del otro lado, ¿qué te parece hacer algunas campañas de paid media llegando a quienes creés que son tu público objetivo? Tranqui, si este no es tu fuerte, podés investigar las herramientas de Meta o Twitter, o contratar a alguien que se dedique a eso. Pero no es tan complicado.
- La elección de la red social es clave. Probablemente no sean las mismas personas las que están en TikTok, Twitter, y Facebook. ¡Atenti ahí!
- Los mensajes tienen que pensarse en base a cómo creés que estas personas hablan, mientras que las imágenes también tienen que adecuarse al contexto.
Una vez que los anuncios están en marcha, dale unos 5 días para ver cómo funcionan, y revisá si hay oportunidades de mejora.
¿Siguen ahí?
Ahora ya tenés información que no tenías cuando arrancaste, pero no quiere decir que hay que escribirla en piedra. Esto es dinámico, y merece una revisión periódica. Puede pasar que tu público objetivo vaya mutando, y que también lo deba hacer tu producto o servicio. ¿Qué pasa si vendés viandas congeladas y no te diste cuenta que tus clientes fueron haciendo otras elecciones alimenticias? Puede que no entiendas por qué ya no te compran esas pastas espectaculares si te siguen saliendo riquísimas, si no te enteraste que la mayoría fue dejando el gluten.
¡Así que atenti! Hay muchas herramientas para analizar a la audiencia e ir preguntándoles qué necesitan. ¡Ni hablar si tenés una tienda online! Ahí tendrás muchas chances de interactuar.
Eso es todo. ¡Entonces manos a la obra! Es hora de ponerte a buscar tu público objetivo para potenciar tu negocio. Los resultados te van a sorprender.