4.8
(8)

En lo que a préstamos respecta, un par de consejos o sugerencias nunca están de más. ¡Es que pedir plata es un temón! Ya sea a tus suegros, a tus amistades, o al banco. Antes de solicitar un crédito personal, seguro vas a querer saber si le estás vendiendo el alma al diablo, ¿no?

Motivos para pedir un préstamo hay miles. Lo importante es que sepas que realmente necesitás esa plata, para qué la vas a usar y, sobre todo, cómo vas a devolverla. Pero, ¿qué otras cosas hay que tener en cuenta al momento de sentarse a hablar de préstamos? ¡Acá te lo contamos todo!

10 preguntas que debés hacerte antes de pedir un préstamo

  1. ¿Necesito esta plata para cubrir una necesidad prioritaria, o es una compra impulsiva?
  2. ¿Es posible esperar, ahorrar y recién ahí hacer el gasto?
  3. ¿Puedo afrontar este gasto o deuda sin pedir prestado?
  4. ¿Cuánta plata necesito?
  5. La entidad en la que solicito el préstamo, ¿es confiable?
  6. ¿Conozco las tasas de interés, las comisiones, y todos los gastos asociados?
  7. ¿Durante cuánto tiempo estaré pagando el préstamo?
  8. ¿Cuál es el valor de la cuota que tendré que pagar?
  9. ¿Cuánta plata voy a devolver en total?
  10. ¿Qué pasa si en algún momento no puedo pagar una cuota?

Es el famoso y viejo truco de pensar en frío y analizar si contraer esta duda no va a comprometer tus finanzas personales, o incluso las familiares. Si necesitás pedir plata prestada para afrontar un nuevo gasto, es fundamental dejar pasar al menos dos días para descubrir si todavía sentís que es importante adquirir ese producto o servicio. Si en cambio, es para pagar una deuda, prestá atención si las tasas de interés que estás por aceptar no son más caras que las que ya tenés que cancelar. 

Si después de responder esas 10 preguntas seguís pensando que un préstamo te ayudaría, analicemos qué tener en cuenta antes de pedirlo.  

Tipos de préstamos

  • Préstamo personal o de consumo

En ocasiones estos se identifican con el objeto a financiar, por ejemplo, préstamos para comprar un vehículo o prendarios, préstamos vacacionales, etcétera. El monto que suelen ofrecer las entidades financieras está condicionado por el scoring crediticio de la persona que lo solicita, y la garantía que ofrece.

Pedir un préstamo prendario para comprarte un vehículo es posible.


Hagamos un zoom en los préstamos prendarios. En este caso, la garantía es una prenda sobre el bien que se está adquiriendo, por lo que no podrás vender el auto /camioneta / moto hasta no cancelar la totalidad de las cuotas.

  • Préstamo hipotecario

Estos productos tienen como objetivo comprar o refaccionar una vivienda u otro inmueble. Quien lo solicita otorga en garantía el propio inmueble para el que solicita el préstamo (hipoteca), que pasará a la entidad financiera en caso de que el prestatario no cumpla con su pago.

En este caso, se involucran montos mayores de dinero, los plazos de devolución suelen ser más largos y las tasas de interés inferiores.

El secreto de tus tasas… de interés

La tasa de interés para préstamos bancarios en Argentina no es tan sencilla de entender como puede parecer a simple vista. Bueno, perdón, en este país y en otros tantos, tampoco es que hayamos inventado la rueda.

La tasa de interés es el precio que el banco u otra entidad financiera te cobra por prestarte plata. En general, lo que vemos cuando pedimos un préstamo es lo que se conoce como Tasa de Interés Nominal Anual (TNA). Y como su nombre lo indica, se expresa de forma anual y en porcentaje.

Primer tip: la TNA puede ser fija y mantenerse estable a lo largo del préstamo, o variable, y cambiar periódicamente. Es importante que sepas qué tipo de tasa vas a tener que afrontar y, si es variable, saber cómo se ajusta. 

Pero -sí, siempre un pero-, la tasa de interés es solo uno de los componentes que conforman el costo de un préstamo. También hay comisiones y otros gastos asociados, como costo de apertura y mantenimiento de cuenta, costo de cancelación anticipada, IVA, etc.

Por eso, el segundo tip es que para comparar propuestas o saber cuánto vas a terminar pagando, observes el Costo Financiero Total (CFT) que incluye la Tasa de Interés Efectiva Anual (TEA, lo que efectivamente terminás pagando de interés), y las comisiones y gastos extra.

¿Tercer tip? La entidad con la que tomes el préstamo tiene que informarte cuál es el CFT de tu préstamo. Sí o sí, y por escrito. 

¿Cómo calcular la cuota con CFT?

Calcular la cuota con CFT es mucho más fácil que hacerlo solo conociendo la TNA y la TEA en préstamos. Esto es porque ya sabés cuál es el costo total real.

Si querés saber calcular el valor de las cuotas considerando este concepto, tenés que dividirlo por la cantidad de cuotas que tengas que pagar hasta la cancelación del préstamo. 

Bueno, en realidad, el cálculo de los intereses se hace sobre el capital pendiente de amortizar, o sea, la plata que te falta pagar después de cada cuota. 

Sin embargo, sabiendo el CFT es más fácil hacer este cálculo progresivo, aunque siempre es mejor revisar el cuadro de amortización con las cuotas desglosadas que te da el banco. 

Cancelación anticipada de un préstamo

Pensarás que si lográs pagar tu préstamo antes de tiempo te podrían premiar o hacer un descuento, ¿no? Pues… no. El Banco Central de la República Argentina señala que si tu acuerdo “contempla la posibilidad de una cancelación anticipada, parcial o total, es conveniente conocer cuál es su costo. En el caso de precancelación total, no se admitirá la aplicación de comisiones cuando al momento de efectuarla haya transcurrido al menos la cuarta parte del plazo original de la financiación o 180 días corridos desde su otorgamiento, de ambos el mayor”. 

Pasando en limpio, si solicitaste un préstamo a 24 meses -por ejemplo- vas a tener que esperar como mínimo 6 meses para devolverlo sin que te cobren una comisión por cancelación anticipada. 

Vamos a la práctica

¡Cuánta teoría! Esperamos no haberte mareado. Ahora que ya tenés muchísima info para prestar atención a la letra chica y no meterte en un berenjenal cuando pidas el préstamo, te recomendamos usar los simuladores que ofrecen las diferentes entidades financieras.  

Si contás con una tarjeta de crédito de Naranja X, podés ingresar acá y descubrir cuánta plata tenés disponible para solicitar. Vos elegís la cantidad de cuotas, y al toque te enterás el monto total a devolver, sin vueltas ni sorpresas.

Somos un poco plomos e insistentes con el temita de las deudas buenas y las deudas malas, ¡culpables, señor juez! Sin embargo, estar alertas y no comprometer los ahorros y el fondo de emergencia por un capricho, es muy importante. No es lo mismo solicitar un préstamo para iniciar un negocio, cubrir un tratamiento médico, o ampliar la casa, que para comprarte un teléfono nuevo. ¿El celu con tapita tira un tiempo más? ¡Dale para adelante!  

¿Nos contás qué te pareció este contenido?

Promedio 4.8 / 5. Cantidad de votos 8

Todavía no hay votos, ¡es tu oportunidad de primerear!

Nos rompe el corazón que la nota no te sirva

Danos la chance de mejorar, porfa.

¿Tenés alguna sugerencia? ¡Te leemos!